Llevar una vida saludable es vital para evitar afectaciones futuras a la salud, pero debido al continuo estrés en el trabajo, casa u oficina, muchas veces es imposible comer a las horas idóneas, dormir ocho horas o cuidar la alimentación.
Este ritmo de vida tarde o temprano termina cobrando la factura a nuestro cuerpo, no sólo en lo físico sino también en lo mental, y es por ello que identificar cuando algo no está bien en el cuerpo o mente es de suma importancia.
¿Cómo estás de salud?, ¿tienes mucho cansancio, sufres de piel reseca o presentas mareos frecuentes? Tal vez estás a punto de sufrir una enfermedad y no lo sabes.
- Deterioro en uñas y cabello. Si presentas cabello seco, opaco y quebradizo, o uñas fáciles de romper, pueden ser síntomas de una acumulación de estrés o principios de anemia, ya que no cuentas con suficientes glóbulos rojos sanos.
- Tener una mala noche es normal, pero si es continuo, podrías ser propenso a enfermedades psiquiátricas como: Ansiedad, depresión o esquizofrenia.
- Piel en mal estado. El cutis duro, seco o rojizo, podría ser un indicador de cáncer de piel, dermatitis atópica o escabiosis, entre otras enfermedades dermatológicas.
- Desmayos frecuentes. Esta sensación podría deberse a una mala circulación en la sangre o ritmo cardiaco lento o rápido que, si no se cuida, podría derivar en un paro cardiaco.
- Mareos sin causa aparente. Perder el equilibrio es normal, pero si dura varios minutos es un indicador de que tienes una arteria del corazón bloqueada debido a acumulación de grasa.
Los síntomas son muchos y muy complejos, pero estos indicadores son fáciles de detectar y pueden ser la línea delgada entre la vida y la muerte, aunque, para salir de dudas, lo recomendable es consultar a tu médico.
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