El día de 3 de septiembre, Miguel Barbosa, gobernador de Puebla, dio a conocer en una videoconferencia sobre el abandono de un bebé de dos meses con tapones de toallas húmedas en fosas nasales, faringe y laringe.
La delegada Rosario Orozco Caballero se comunicó con la presidenta del Sistema Nacional de DIF para pedir ayuda porque se encontró a un menor de edad que estaba a punto de morir.
Rosario Orozco decidió mandar una ambulancia para que trasladaran al bebé al Hospital del Niño Poblano, donde le realizaron estudios, descubriendo que el menor tenía tapones de toallas húmedas en sus fosas nasales, faringe y laringe.
Tras dos días de estar internado en el hospital, el menor de edad, ya se encuentra estable y fuera de peligro. La FGE de Puebla ya ha informado que se ya detuvo al padre de este menor de edad y giró una orden de aprehensión contra la madre, que por ahora se encuentra prófuga de la justicia.
El Sistema Nacional de Desarrollo Integral de la Familia quedó con la custodia definitiva del bebé de dos meses de edad, y también se se informó que los abuelos también tienen orden de aprehensión por estos hechos.
