Cada 31 de diciembre se ha vuelto costumbre celebrar el año nuevo de una manera peculiar. En Sinaloa, se realiza un ritual violento, donde los habitantes están a la espera de la media noche, para dar inicio con balazos al aire.
Esta práctica no es exclusiva de Sinaloa, también se realiza en otros estados del norte del país como Sonora y Baja California.
La costumbre de los disparos se enfatiza por la impunidad, debido a que las personas realizan este tipo de acto, sabiendo que no habrá consecuencias.
En las celebraciones de fin de año de 2016 las autoridades recibieron 105 reportes de personas que denunciaron a través de llamadas telefónicas que alguien había disparado, según reportaron medios locales. Además, entre diciembre de 2010 y de 2016, ha habido 47 heridos y seis muertos, esto de acuerdo a funcionarios locales que difundieron medios de Sinaloa.
Cabe señalar que las autoridades buscan revertir esta situación con “estrategias conjuntas” con la Fiscalía de Sinaloa y el Poder Judicial para proceder en contra de las personas que disparen. Además se reitera que al detectar cualquier domicilio donde se realicen disparos, se solicitara una orden de cateo para revisar dicho domicilio, de tal manera que autoridades apliquen la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos.
Líder/Redacción
