El pasado 3 de julio la NASA detecto una gran llamarada solar y que después de que el fenómeno se desprendiera del sol, avanzaba rápidamente con dirección a la atmósfera de la Tierra, lo que podía causar una interrupción importante en las redes de comunicación, así como en las estructuras de energía eléctrica.
De manera técnica explicó que la tormenta solar va rumbo a la Tierra a 1.6 millones de kilómetros (994,193.9 millas) por hora, y ese número podría aumentar aún más.
Este es un caso de erupción solar y como principal suceso será un apagón en la tierra que fueron descubiertas por el servicio del National Oceanic and Atmosferic Administration (NOAA) y divulgadas oficialmente por su web del clima espacial.
Además de lo anterior tendrá efecto directo en sistemas GPS, en la señal del teléfono móvil, la televisión por satélite y potencialmente también en las redes eléctricas, según la NASA.
