Un estudio realizado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de España, analizó los datos de 102 pacientes que estaban infectados por SARS-CoV-2 y quienes no lo estuvieran. Para poder determinar la gravedad que pudiera desarrollar el virus en cada persona.
Para este estudio se usa la proteína celular ACE2, que se caracteriza por permitirle al virus pasar por el cuerpo de la persona. En una prueba desarrollada, este permite contar cuántos fragmentos de esta proteína hay en el cuerpo y cuántos se forman después de que el virus logra interactuar con el organismo.
Los niveles ACE2 y sus fragmentos, vuelven a la normalidad después de que los pacientes se recuperan, aproximadamente unos 58 a 70 días. Con esto se sugiere que se podría llegar a medir la evolución de infección por coronavirus y así determinar la gravedad que pueda generar en cada paciente.
Gracias a los niveles de la ACE2 fragmentada se pudo identificar qué pacientes se encontraban infectados por SARS-CoV-2 y quienes estaban infectados por el virus de la gripe A. Dijo Javier Sáez Valero, líder del proyecto e investigador del Instituto de Neurociencias de Alicante (IN-CSIC-UMH): «Hemos podido determinar que parte de los fragmentos ACE2 también se encuentra la proteína completa en el plasma, que da información de cómo están de afectados los tejidos durante la infección»
