El amor de un padre no tiene límites
Liliana y su novio, ambos de 19 años, intentaron cruzar el Río Bravo en Tamaulipas, sin embargo, fueron arrastrados por la corriente y ella desapareció. El joven tras haber batallado afortunadamente logró ponerse a salvo por lo que de inmediato dio aviso a las autoridades y a los familiares de la joven sobre lo ocurrido
A pesar de que las autoridades dieron por terminada su búsqueda sin obtener éxito, el padre de la joven no se resignó y decidió exponer su propia vida, por lo que salió en busca del cuerpo de su hija, a bordo de una lancha, el hombre emprendió la búsqueda ya que no aceptaba el hecho de jamás volver a ver el cuerpo de su hija.
El hombre sabía que no sería nada fácil pero la convicción de encontrar a su hija pudo más, por lo que tras no rendirse, el padre de la joven logró encontrar su mochila, lo cual significó un gran aliento y la esperanza de encontrarla no flaqueó.
A pesar de que las autoridades de auxilio descartaron cualquier posibilidad de localizarla, finalmente la encontró boca abajo, lamentablemente sin vida, y con el dolor en el alma amarró el cuerpo de la joven para arrastrarlo hasta llegar a la orilla. Con un inmenso pesar cedió ante el llanto y no pudo contenerse más, llenando de reclamos a las autoridades, y también a la vida, pues su hija Liliana era una jovencita que tenía un gran futuro por delante.
Finalmente, después de tres horas, que probablemente para el triste padre pudieron haber parecido no tener fin, los agentes del servicio Médico Forense sacaron el cuerpo del río pues antes de hacerlo tenían que documentar todo.
Pero lo más triste y doloroso, pero al mismo tiempo lo más bello y hermoso que se puede escuchar, fue lo que el padre dijo a su hija, «Descansa hija, descansa mi amor, tú papito te encontró»
