En los días extremadamente fríos y/o con vientos fuertes, es importante limitar la cantidad de tiempo al aire libre, ya que las exposiciones prolongadas a esas temperaturas, ocasiona que el corazón se esfuerce más o la presión arterial suba demasiado.
Para evitar los cambios bruscos de temperatura, se recomienda:
-Abrigarse por capas
-Protegerse el rostro, la cabeza, manos y oreja
-Evitar respirar aire frío cubriéndose la boca y nariz
-Utilizar calcetines de lana o ropa térmica
-Con bloqueadores y protectores labiales para evitar que el frío los reseque
-Ingerir más calorías, líquidos tibios, frutas, nueces o avellanas
-Aumentar la dosis de vitaminas
De igual manera se recomienda mantener una ventilación adecuada en caso de usar algún calefactor, horno o chimenea para evitar intoxicaciones por monóxido de carbono.