El mexicano Diego pollino originario de Guadalajara, Jalisco termina el Aroman de Lanzarote con una maratón de espaldas en cinco horas (los que lo practican lo llama retrorunning) ; es un atleta de alto nivel que nunca ha corrido como los demás. Y tampoco ha visto la vida igual, De muy joven practicó la marcha a buen nivel junto a algunos de los que convirtieron a México en una de las grandes potencias mundiales de la disciplina. Cuando cumplió los 20 dejó el atletismo y el deporte para dedicarse a sus negocios, cuando llegó a los 30, respondió a la crisis del cambio de década volviendo al deporte.
El corredor dio mención “Empecé a correr como todos, pero un día, como juego me dio por correr marcha atrás poco después me di cuenta de que no solo esa forma de avanzar de espaldas la practicaba más gente, sino de que hasta había una federación específica que organizaba un campeonato del mundo en Inglaterra” cuando le preguntaron por qué corre de una forma irregular; cuando marchaba por los parques de Guadalajara, los que le veían le exigían que corriera como todos.
FUENTE/EL PAÍS
