Miguel N de 30 años de edad, se desempeñaba como policía auxiliar en Tehuacán. Estaba de guardia en la agencia de autos Seat, ubicada sobre la calzada Adolfo López Mateos. Vivía en San Vicente Ferrer con su esposa y tres hijas, una recién nacida, una de cinco y otra de ocho años.
Fue la mañana de este martes 2 de agosto que lo encontraron sin vida en el cubículo donde trabajaba. Se presume que se trató de un suicidio. Las autoridades han iniciado la carpeta de investigación para tratar de esclarecer el deceso.
Tras enterarse de lo sucedido, la madre de Miguel, quien era el hijo mayor, fue a su trabajo, donde le dieron la lamentable noticia y se derrumbo en lágrimas, «anoche lo vi y estaba triste», dijo su mamá.
«Ya me voy ma», lo repitió tres veces como si quisiera anunciarle a su mamá que ya no se verían más.
A su vez recordó la última conversación que tuvo con él. Ella preparaba unos tacos y Miguel le dijo: “Ya me voy ma”; ella respondió que se cuidara y otra vez repitió “ya me voy ma”, incluso lo hizo una tercera ocasión.
Tras saber de su muerte, sintió que la última vez que habló con su hijo, él le había tratado de decir que ya no se volverían a ver, lo que le generó sensibilidad e incluso lamentó no haberlo abrazado en ese momento.
La esposa comentó que alrededor de las 07:00 horas habló con él por celular, pero se cortó la llamada e intentó llamar nuevamente, pero ya no le contestó.
Tiempo después se enteraron que el vigilante de la empresa de autos fue encontrado sin vida, intentaron llamar y el celular de Miguel sonaba, pero no contestaba. Autoridades ya estaban atendiendo el hecho.
Familiares llamaban al celular, en la pantalla de este aparecía el contacto de “Hija Lupita” quien le estaba marcando. Debajo del celular estaba una nota bañada en líquido hemático donde aparentemente explicaba los motivos que lo orillaron a tomar esa decisión, además de la pistola con la que se habría quitado la vida.
Técnicos en Urgencias Médicas de la Cruz Roja arribaron e intentaron auxiliarlo, pero ya había muerto por un disparo a la altura de la mandíbula. Posteriormente la zona fue acordonada mientras elementos de la Agencia Estatal de Investigación (AEI) de la Fiscalía realizaban el peritaje y levantamiento del cadáver con el apoyo del SEMEFO.
