A su cortada edad, Malick Ndiaye., y al puro ingenio del menor llevo a la fabricación su propio telescopio, usando alambre y latas de refresco, con la creación de su propia imaginación lo logro, ahora ya puede mirar las estrellas.
De acurdo a versiones del menor de edad, el amor por uno de los libros “Todo el Universo” que le heredó su padre, aprendió a identificar las estrellas y ahora conoce más del espacio después de su curiosidad que lo llevo a desarrollar este telescopio.
Este mismo contexto, la creación de este, le llevo dos semanas, quien una vez teniendo este ingenio, lo primero que hizo fue enfocar al cielo nocturno y vio los detalles de la superficie de la Luna, al momento de su impresión, le pareció que podía tocarla con la mano.
Tras su narración de cómo se dio a conocer, señala que un día estaba en la puerta de su casa y pasó un hombre que trabajaba en la obra de la carretera. Quien se acercó y preguntó si era algo de topografía y le menciono que no, mismo que indico que era un telescopio que me había fabricado el mismo. Fue en ese momento que le tomo fotografías y un vídeo y los subió a Facebook y su historia se hizo viral”.
Por otro lado narro que su papá, es un hombre bastante interesado en leer y ver documentales, maravillado por todas las cosas que tenía que ofrecer la tierra. El señor fue chófer del expresidente de Senegal, Abdou Diouf, quien sabiendo las pasiones de su chofer, le regalo varios libros, incluyendo ‘Todo el universo’. Este libro le sería heredado a su hijo, al igual que su curiosidad.
Hoy, Malick Ndiaye tiene un puñado de hojas con garabatos, puntos y rayas, que traducen el cielo que ve todas las noches con su telescopio dibuja sus propios mapas del cielo.
