Huauhinango, Pue.- Mientras que algunas familias, sepultan a sus muertos, otros permanecen internados en distintos hospitales de la ciudad de Huauchinnango, algunos más refugiados en los albergues instalados por el gobierno municipal.
A casi una semana, el olor a muerte, aun se despide en esa localidad, para los habitantes de esta localidad, la pesadilla aún no concluye, la recuperación tardara varios meses, quizá años, en volver a la normalidad.
La destrucción que dejó a su paso la tormenta tropical en ese lugar, dejó muchos testimonios, la gente que de manera súbita perdió a sus familias y se quedó sin un techo donde dormir, no logra borrar de su mente, la forma en que este fenómeno meteorológico llegó y destruyó todo.
Ojala y los trabajos de reconstrucción lleguen lo más pronto posible para que todas estas familias, puedan reponerse, en parte, de este dolor que en este momento están viviendo.
REDACCIÓN/LÍDER
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